“El café es un bálsamo para el corazón y el espíritu.” – Giuseppe Verdi.
En el mes del Café, a propósito de su reciente día internacional (Octubre 1), y de este otoño lluvioso, nos ha nacido del alma hablarles de esta muy popular bebida. Esta vez les traemos algunos datos y curiosidades que más nos han llamado la atención, y con los que elaboramos nuestra propia guía cafetera.
Producción y consumo.
*Después del agua, es la bebida más consumida del mundo, compartiendo cuadro de honor con el te, el zumo de naranja, la cerveza, la coca cola, el vino y el vodka.
*Se calcula que en un año se beben “apenas” unas 400 mil millones de tazas de café. En promedio una persona bebe 3,1 tazas cada día, lo cual está dentro del límite aceptable de máximo de 400 mg de cafeína al día. Esto a su vez es aproximadamente la cantidad de cafeína contenida en 4 tazas de café, 10 latas de coca cola o 2 bebidas energizantes.
*Los países nórdicos se apuntan como los mayores consumidores de café a nivel mundial, así tenemos un top 3 compuesto por: Finlandia con 11,6 kg por persona al año, Noruega con 10 kg e Islandia con 8,9.
*Los países de la Unión Europea son los mayores importadores de café del mundo superando en una relación de 2:1 al resto de continentes.

Dominio mundial. Este mapa revela cuánto cuesta un café en cada país del mundo según el índice The World Coffee Index 2021.
*En España, actualmente se consumen “sólo” 4,5 kg de café per cápita por año, que equivale a unas 3 tazas y media de café al día, muy cerca del máximo recomendado que es 4. Cabe destacar otro dato que nos resultó curioso que dice que beber al menos dos tazas al día reduciría el riesgo de enfermar por Covid. Otra manera de vacunarse, dirían algunos chistosos, pero más allá de eso, lo que sí se podría decir es que la tendencia de consumo en España no es excesiva y es hasta saludable.
*Algunos países, sin embargo, poseen un consumo tan bajo que no representa ni los 0,01 kg per cápita. Estos son: Nigeria, Pakistán, Azerbaiyán, Uzbekistan, y…. Adivinen. Kenia, que incluso posee una variedad especial de café, catalogado como uno de los mejores del mundo, y el gigante asiático: CHINA, tan acostumbrado a estar en tantos tops de consumo.
*Puede que el café más famoso sea el de Colombia, pero es Brasil quien, con un 30% de la producción mundial, domina el mercado.
*A pesar de que se cultiva en solo 60 países del mundo, se calcula que más de 125 millones de personas trabajan y viven de su producción.
Algo de historia y geografía.
*Las primeras plantas de café fueron observadas en el siglo IX en las regiones montañosas de Etiopía. Según numerosas leyendas fue un pastor el que, tras ver el efecto que unas plantas con frutos rojizos (cafeto) tenían en su rebaño (una gran actividad incluso en la noche), decidió probarlas. Se dice que tras comprobar el efecto vigorizante que tenía, llevó unas muestras a un monasterio donde los monjes lo cocinaron y lo probaron. El resultado del brebaje amargo no gustó, por lo que decidieron arrojar los granos restantes a las brasas para quemarlos. Fue entonces cuando el aroma de esos frutos quemados empezó a ser agradable y decidieron elaborar la bebida con ellos. Para el siglo XVI, se había expandido por el resto del Medio Oriente, Persia, Turquía y Norte de África. Luego, se extendió a Italia y el resto de Europa hasta Indonesia y el continente americano.
*Los europeos llamaban al café ‘vino árabe’, ya que llegó a Europa a través de Turquía, estando allí de hecho la primera cafetería conocida: Kiva Han, la cual abrió sus puertas en 1475 en Constantinopla, la actual Estambul.
*La cafetería más antigua de Europa es el Café Florian en Venecia, el cual abrió sus puertas en 1720 en la céntrica Plaza San Marcos con el nombre de ‘Alla Venezia Trionfante’.

El pasado 29 de Diciembre este mítico lugar cumplió 300 años en el medio de rumores de cierre definitivo producto de la pandemia…
*En Nápoles nació la tradición del café pendiente (Caffè sospeso), que consiste en que alguien paga un café sin consumirlo para que una persona más necesitada se lo pueda tomar más tarde gratis.
*Existe una isla muy cerca de Groenlandia, llamada Kaffeklubben (club del café), la cual fue visitada por primera vez por el explorador danés Lauge Koch en 1921, quien le puso ese nombre en referencia al club de café del museo de mineralogía de Copenhague.
Algunas rarezas (o no tanto).
*En Japón y Corea del Sur son muy típicos los «cafés de gatos», llamados Neko (gato en japonés) Cafés, en los que la gente va a tomarse esta bebida a la vez que juega con adorables mininos. Esto, sin embargo, ya no es exclusivo de estos países, y encontramos Neko Cafés en muchas ciudades del mundo. En Madrid está el primero de España, La Gatoteca, quienes, por cierto, están próximos a reabrir este otoño, luego de más de un duro año de pandemia.
*Como no es de extrañar, y también en Japón, existe un spa, Yunessun Spa Resort, donde es posible bañarse en piscinas de café. Y es que Japón es archiconocido por ser muy innovador, tener variantes “raras” de muchos productos y otros tantos que solo existen allá.

En Japón lo tienen claro…
Café descafeinado.
Un sacrilegio para muchos, pero no para los que quieren disfrutar del aroma y sabor del café sin sentir los efectos de la cafeína. Para extraerla se suele emplear cloruro de metileno o acetato de etilo como disolvente. Los granos de café verde se humedecen para volverlos porosos, y se ponen en remojo en el cloruro de metileno hasta que la cafeína se haya disuelto. Se elimina el disolvente con un evaporador y se lava el grano. Finalmente el grano se seca con aire caliente. El principal problema con estos dos métodos es que afectan al aroma y al sabor del café, por lo que no son los más recomendables y por esto son utilizados para la obtención de cafés de poca calidad y bajo precio.
A pesar de que la Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU limita la cantidad de cloruro de metileno a 10 partes por millón (0,001%) en el café descafeinado tostado, se sabe que la exposición al cloruro de metileno ha sido vinculada al aumento del riesgo de contraer varios tipos de cáncer, razón por la cual existen algunas dudas sobre el uso de este solvente y ha ganado popularidad el acetato de etilo como alternativa, una sustancia más natural que tiene presencia en las frutas, incluso en el mismo café.

El descafeinado al agua es un proceso de eliminación de la cafeína respetuoso con el café y con el medio ambiente y da lugar a un café de gran calidad que conserva todo su aroma y sabor.
Por otra parte, los cafés de más alta gama se obtienen por par de procesos ecológicos y que conservan mejor su aroma y sabor. Estos procesos sustituyen el cloruro de metileno por dióxido de carbono o agua. En el caso del agua. destaca el método Swiss Water, un método patentado que emplea extracto de café verde y filtros de carbono para eliminar la cafeína por medio de la ósmosis, está certificado como orgánico y utiliza solo temperatura y tiempo para eliminar la cafeína con suavidad, es sencillo de entender pero, y aquí su «defecto», requiere de una alta tecnología.
En cuanto a definiciones, cabe destacar que al igual que ocurre con las cervezas sin alcohol, descafeinado no significa que no tiene cafeína, sino un máximo de 0,1 % por café tostado y molido, con lo cual un kilogramo de café verde no tiene más que un gramo de cafeína, y 0,3% en caso de que sea extracto de café.

Cafeína… ¿Salvador o demonio?
Género, edades y profesiones.
*Las mujeres consumen ligeramente más café que los hombres: Un 66% versus un 62%. En muchos países estos porcentajes apenas difieren.
*El consumo va aumentando con la edad, hasta que llegados a los 65 empieza a disminuir. Los que más consumen café tendrían entre 35 y 64 años. Como ejemplo de esto, tenemos el caso de Estados Unidos, donde el 74% tendría más de 55 años.
*Los profesionales que más café consumen después de los científicos son los que trabajan en relaciones públicas y marketing, profesores, escritores, editores, personal sanitario y los expertos en finanzas. ¿Qué tienen todos en común? Mucho estrés y horarios de infarto que les obligan a estar alertas durante muchísimas horas, y hablando de horas, la pregunta del millón…
¿Cuál es el mejor momento del día para tomar café?
El estudio de las influencias de sustancias estimulantes como el café (café descafeinado aparte, por supuesto), en nuestros ritmos circadianos, esos cambios físicos, mentales y conductuales que siguen un ciclo de 24 horas, se conoce como cronofarmacología. El saber que el efecto del cortisol y la cafeína es similar (ambas nos mantienen alertas y elevan nuestro nivel de atención) es lo que permite determinar la mejor hora para tomarse un cafecito.
Los efectos de la cafeína no son tan evidentes cuando estamos en máxima alerta (mayores niveles de cortisol), pero sí cuando los niveles de esta hormona están en caída, lo cual suele ocurrir entre las 9:30 y 11:30, pasadas las 13:30 y antes de las 17 horas. Estas serían por tanto, y en teoría, las mejores horas para tomarnos un cafe, ya que se aprovecharían al máximo sus beneficios sin afectar las horas de sueño. Esto se aprecia en la siguiente gráfica.

Así son las caídas en los niveles de cortisol durante el día que nos señalan las mejores horas para un «snack» o un buen café.
Luego claro, están los que toman café a todas horas, quienes desarrollan una tolerancia a la cafeína, pudiendo volverse dependientes y tener cada día esa sensación de fatiga y de NECESITAR el café para poder, como dicen muchos, funcionar y “ser persona” (jajaja). Porque uno solo y a ciertas horas ya no basta. Por eso no es nada extraño ver como hay quienes se pueden tomar un café y luego irse a dormir, tan ricamente.
Y tan ricamente, concluimos el artículo de hoy, que publicamos en este día tan extraño marcado por una caída mundial de varias de las principales redes sociales. Muchos van a tomarse más de un café hoy, y fuera de horario, sin duda. Sin más que decirles, esperamos les haya gustado esta pequeña guía cafetera y como siempre recordarles que agradecemos que nos lean. Manténganse alertas (cuando toque, ya saben), sanos y positivos, y…. ¡Hasta la próxima!
